Las bellas artes siempre han reflejado la cultura con la que convive la sociedad y la historia que traen aparejada. Todos aprendieron de todos y eso hizo que evolucionen: crearon nuevas técnicas, nuevos métodos y nueva tecnología que facilitó o mejoró sus tareas. Upa. Dije tecnología y artistas, ¿Qué tiene de malo? nada, ya que la gran mayoría supo integrarse al mundo digital de la mejor manera. Solo que hay una porción de ellos que está negada. Es entendible que si tenés una gran habilidad manual, desconfíes de lo digital. Una vez me encontré con un artista muy bueno al que le pregunté por qué no estaba en Instagram, y me respondió: -Nahh yo estoy esperando a que llegue la nueva red social. Cuál es la nueva?– (me pregunta), y yo le tiré VERO, -Ahh bueno, entonces esa –. Acá se juntaron dos cosas: Ignorancia digital y predicciones erradas. Lo primero es creer que lo mejor es lo nuevo, y en un mundo de redes sociales, lo mejor es donde estamos todos, o al menos los que nos importan. Algo así pasó con Snapchat cuando Instagram le robó sus stories. Cuántos de los lectores de acá habrán criticado a Instagram y a la semana estaban subiendo stories ahí y soltando Snapchat?. Lo segundo es que VERO, fue una plataforma que se lanzó con la propuesta de Menos redes sociales y más vida social, y se ve que la gente eligió las redes.
Un artista puede ser muy talentoso y tener 362 seguidores en Instagram, 27 si sacamos a los amigos y parientes. Un artista puede ser un ladri bárbaro y tener 900.000 seguidores. La diferencia no es el talento, es que uno cree en el poder de internet y el otro lo rechaza con mil excusas que cada vez cierran menos, como aquellos que te avisaban que se iban de facebook. Esta bien, no es para vos, pero lo tuyo es una opinión: internet va a hacer explotar cada vez más artistas aunque pienses como pienses.
Ahora vamos con los que sí creen en las redes. Quizás estés haciendo algo y te da miedo exponerte. Tranqui, algunos le llaman el síndrome del impostor pero es normal, todos tuvieron que dar el primer paso alguna vez. Intentá no salir con demasiada expectativa pensando en que se va a llenar de likes cada posteo en el que mostrás tu arte. Una buena forma de comenzar es planteando un proyecto creativo, algo que te permita fijar un objetivo y terminarlo. Otra cosa que puede ayudarte a barrer contra la inseguridad de tu posteo, es que al otro día lances otro, y luego otro, y luego otro, así te vas a sacar la presión.

Un artista tiene que reflejar lo que es, no podés combinar tres obras tuyas al lado de una foto POV cortándote las uñas de los pies en una mesita ratona de tu casa, por eso es importante distinguir entre tu vida personal online y tu vida profesional. La gente que te sigue, lo hace por que le gusta algo que hacés, fijate qué es y hacé más de eso, y a la vez dejá de hacer lo que no levanta ni 2 likes de lástima. Si querés mostrar algo de tu vida, probá mezclándolo con tu arte. Esto se trata de experimentar. Si estás esperando que alguien se fije en vos, solo una foto que no va y ya es suficiente para que deje de prestar atención. Mirá lo que pasa en las galerías de arte: los curadores tratan de sacar el ruido visual de alrededor para que te enfoques más en la pieza.
Acá no necesitas saber programar, podés utilizar una plataforma ya preparada para mostrar lo que haces, y esto es como en la vida real: vas a donde está toda la gente. Quizás no seas un artista masivo, quizás tenés tu nicho, eso es lo bueno de los seguidores: no necesitás cientos de miles, necesitás los que realmente aprecian lo que hacés, aunque no sean tantos, pero no porque no esté bueno tu arte, sino porque hacés algo muy específico. Conocí un pibe que cantaba salmos de hace siglos, me pareció muy interesante, pero es claro que aunque esté 24hs detrás de las redes sociales no va a tener más seguidores que Bándalos Chinos.
Estuve hablando con nuestra profe Florencia Loda, que trabaja como Directora Creativa en la agencia de publicidad Y&RVML y esto fue lo que me dijo:
´´Creo que hoy Instagram se convirtió en una fuente de inspiración para muchos. Y dentro de esa inspiración, también nos encontramos muchas veces con nuevos artistas que comenzamos a seguir porque nos interesa su estilo, su arte, su creatividad. En varios proyectos tuve la necesidad de encontrar ilustradorxs por ejemplo, y los encontré en Instagram. Ya me voy haciendo mi lista de referencias dentro de la misma plataforma.
Siento que es una manera super honesta de mostrar el laburo. Hay cantidad, hay variedad, todo lo que puedo llegar a necesitar en el momento de buscar a un talento. Es una nueva forma de exponerte, de mostrar lo que hacés de manera simple. Hoy Instagram se convirtió en en un site para muchas marcas, en un portfolio para muchos creativos y en una galería para muchos artistas´´

La semana pasada lanzamos un curso de creatividad gratuito, en el que Santi Pato (otro de los profes), explicaba cómo hackear tu Instagram para convertirlo en una herramienta productiva con la que podés ver muchas referencias. Creo que eso está bueno para los artistas, porque va a favorecer mucho la inspiración y el networking.
También tenés que tener claro que una cuenta de Instagram no va a reemplazar a tu portfolio online, pero si puede ser una extensión. Acá hay que sacarse la presión de tener un feed perfecto, a mi me encantan los artistas en los que puedo scrollear y puedo ver que han avanzado, que han mejorado, por eso me parece un buen lugar no solo para poner trabajos finales, sino para mostrar el work in progress, o ideas más pequeñas y cotidianas. Esto es lo que transforma tu cuenta en algo impredecible, y eso genera mucha más atención. Ahora viene la parte en la que también podrías ponerle hashtags y emojis y esas cosas, pero yo las odio, principalmente porque la mayoría de gente piensa en eso antes que en tener una buena idea para postear.
También estuve charlando con Facundo Moralez, Director Primitive.ink (Co-work art & Print) y me contaba: Creo que es muy importante saber comunicar.Trabajando con artistas es muy común conversar este punto. Producir y mantenerse en movimiento es fundamental en la vida del artista, y el generar contenido y saber mostrarlo propone un gran desafío al artista, al emprendedor.
Lo que me llamó poderosamente la atención fue la cantidad de artistas diversos que provocado por el aislamiento preventivo volvieron a dibujar, a pintar, a conversar, y eso se vió reflejado en las redes. Quién entendió ese cambio desde ya entendió a la gente.
Así que a todos los artistas, sepan que internet está lleno de herramientas que van a ayudarlos a mostrar su arte al mundo, porque de eso se trata ser artista ¿No? Lo importante es que tienen que recordar siempre es: Antes que hacer las cosas por los demás, hagan las cosas por ustedes mismos.